Maillard es mi pastor, todo se me ha de dorar

Snowcrash, de Neal Stephenson

MPortada de Snowcrashe releí Snowcrash de Neal Stephenson.

Lo curioso es que está el texto íntegro, llegar y convertir en el formato que deseemos en esta página web.

Es un libro nerd, por un nerd, para nerds.

La primera lectura data de aproximadamente 1996, cuando Ted Witt me lo prestó. Me gustó mucho en aquel entonces, y me ha gustado más en las relecturas.

Snowcrash narra las aventuras de Hiro Protagonist: hacker, practicante de iaido y kendo, repartidor de pizza para la Mafia; de Juanita: su ex; de Y.T: courier en skate que salva a la Mafia; Raven, el más grande arponero de las Aleutianas, convertido a la religión ortodoxa para cumplir el sueño de su vida, y que anda con una bomba H en el side-car de su moto, y una serie de otros personajes. El bibliotecario la lleva, aunque sea sólo un demonio.

Mezcla de todo: una proto-realidad virtual bastante acertada en sus proyecciones; una visión interesante de cómo las naciones, religiones y hasta cárceles se transformarían en franquicias (Nova Sicilia, Narcolombia, Mr. Lee’s Greater Hong Kong, Reverend Wayne’s Pearly Gates, etc.); un par de complots para dominar el mundo, uno de ellos volviendo a un supuesto estado preconciente de la humanidad en tiempos de Sumer.

Espadas, pistolas, cuchillos, cañones Gatling, varas de bambú y cuchillos de vidrio. Skates, motos, helicópteros, balsas y autos de repartidores de pizza. Un ingenioso —aunque a veces excesivo— uso de la comparación, y personajes bien dibujados hacen que Snowcrash me guste mucho.

No, no es como una droga.

« »