Maillard es mi pastor, todo se me ha de dorar

Autobibliografía: Dune, de Frank Herbert

Para mi, el libro —más bien la serie— es una presentación de información valiosa sobre las capacidades del hombre, y su posible desarrollo, en clave de ciencia ficción, lo que la hace más digerible para los tiempos en que el libro fue presentado.

Aún hoy, varios años más tarde, veo una presentación fragmentaria de la información a lo largo de los 14 libros de la serie.

En el libro se presentan temas tales como el uso deliberado de las religiones para manipular a las masas, la reencarnación, el recuerdo de sí, la responsabilidad del individuo para con la especie, los peligros del uso indiscriminado de la tecnología, la memoria genética, la fuerza del amor y mucho más que hace que además de un libro entretenido, emocionante y que hace trabajar la cabeza, sea un libro que lleva a reflexiones interesantes y que además se va convirtiendo en un descriptor de aquello que nos va sucediendo a medida que aprendemos.

De especial interés es seguir la larguísima progresión de Duncan Idaho, desde un huérfano cazado por deporte por los Harkonnen hasta una totalidad en la culminación de la obra. El verdadero y gran viaje iniciático del héroe en Dune es el de Duncan, resucitado una y otra vez por los Tleilaxu, primero para matar a Paul, y luego a pedido de Leto y posteriormente de la BeneGesserit, hasta aprender y entender todo lo necesario. Hay otros viajes no menores, como el de Paul, que consigue liberarse del oráculo, o el de Leto II que trascendió su humanidad conscientemente en sacrificio tanto para asegurar la supervivencia como para proveer un camino de desarrollo para la misma.

¿Qué resuena para mí en este libro?

Primeramente resonó la historia bien contada: las atmósferas bien pintadas; esas atmósferas barrocas descritas sólo con la palabra —la primera aparición del Barón Vladimir Harkonnen en la historia es un excelente ejemplo, el equilibrio entre el avance tecnológico y lo arcaico, los personajes interesantes, equilibrados entre cualidades y defectos, y la historia, con sus vueltas, victorias, derrotas y muertes, sin caer en el estereotipo de los buenos y los malos.

En segunda, tercera, etc. lecturas, apoyado por otras lecturas externas, se arman los patrones míticos de la historia: el mito del mesías, declarado explícitamente en las intenciones del autor; estas reencarnaciones y aprendizajes en iteraciones sucesivas, confrontando la obsolescencia, aplicando otras habilidades, etc.

Una serie de personajes que resuenan fuertemente son:

  • Paul Atreides
  • Stilgar
  • Gurney Halleck
  • Duncan Idaho, por supuesto
  • Leto II
  • Miles Teg
  • Alma Mavis Taraza
  • Darwi Odrade
  • Murbella

Resuenan por circunstancias distintas, cada uno tiene sus particularidades, pero comparten grandes aptitudes confrontadas con problemas en apariencia insolubles, que son resueltos en forma creativa y altruista, anteponiendo el bien mayor al propio (Leto II, Miles Teg y Darwi Odrade son excelentes ejemplos).

Otra fuente de resonancia del libro son los dichos y máximas, principalmente de las Bene Gesserit que están muy bien hechos, y en general son compartibles —y en ocasiones disentibles— y resumen y llaman la atención sobre diversos temas.

Una interesantísima lectura, un poco fuera de la trama del libro, es el Apéndice I de Duna, las circunstancias ecológicas y la visión de Pardot y Liet Kynes. Está descrita como parte de la historia pero contiene declaraciones poderosas. La que mayor resonancia me causa a mí es el que toda vida está al servicio de la vida. El poder del sueño de Pardot Kynes es también interesante. La narración de la historia de Pardot Kynes está expandida en Casa Atreides y siguientes.

El Apéndice II de Duna contiene interesantes reflexiones sobre las religiones, la experiencia religiosa y el ecumenismo. También es una lectura recomendable por derecho propio, o como un chapuzón de contexto para quien quiera profundizar en el mundo de Duna.

Circunstancias del libro

Mi primera aproximación al mundo de Dune fue la película de David Lynch, que —como vi después— no pudo sino ser un palidísimo reflejo de la riqueza, complejidad y multidimensionalidad del libro. Luego cayó en mis manos la serie de libros en inglés, del 1 al 6: sospecho de Gabriela Ordóñez como la fuente de estos libros. Mugsy Lunsford contribuyó posteriormente con libros de la precuela. Casa Atreides fue un intercambio de libros con ella, recuerdo.

Este libro se lo he predicado a medio mundo, de los que algunos lo han leído, y a esos, a algunos les ha gustado. Alex Rettig se los leyó, y nos debemos una larga conversación al respecto.

Lecturas relacionadas

De Dune más que lecturas directamente gatilladas hay integración entre obras.

La única lectura causada directamente por la lectura de Dune (además de todo el resto de la serie) es el Shah Nameh, de Firdusi, que aparece citado como una fuente de la tradición Fremen.

Citas

La prueba del Gom Jabbar que separa a los humanos de los animales es un fragmento poderoso y resonante. En primera lectura es un poco extraño esto de filtrar a la gente para separar a los humanos, pero tras sucesivas lecturas, cobra sentido al aceptar la doble naturaleza humana, en el sentido que —por ejemplo— le da J.G. Bennett.

—Recuerda que eres el hijo de un Duque —dijo Jessica. Dio media vuelta y abandonó el salón a largos pasos, con un seco roce de su vestido. La puerta se cerró sólidamente a sus espaldas.

Paul hizo frente a la vieja mujer, dominando su irritación. 

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